‘Dragobetele’ o antes de Valentine’s Day

viorele-de-padure

El 24 de febrero queda marcado desde hace tiempo en la mitología rumana como “el despertar de la naturaleza, de los pájaros que comienzan a buscar nidos, de las personas que resuenan con el despertar de la naturaleza a la vida”.

Según algunas fuentes, “se cree que Dragobete es el hijo de Dochia y cuñado con el héroe de la vegetación Lăzărică, una divinidad mitológica del amor similar a Eros (en griego) o a Cupido (para los romanos), quien según la tradición Dacica, era una especie de “padrino cósmico”, que oficiaba a principios de la primavera la boda de todos los animales. A partir de aquí se conserva la idea de que el día de 24 de febrero, personas – chicos y chicas – se reúnen para que su amor se mantenga durante todo el año, como los pájaros (que según la mitología son los mensajeros de los dioses)”. A raíz de este “compromiso” que se celebra en la naturaleza y que asegura su auto-renovación, “Dragobete se convirtió en el protector de la juventud, en general, y de los enamorados en particular”.

Originalmente, se celebraba el 1 de marzo, la fecha de 24 de febrero habiendo sido establecida posiblemente a través de la cristianización de la zona.

dragobete_wikipedia

La tarde de Dragobete, solter@s y parejas festejan bailando, cantando y sintiéndose bien por el simple hecho de compartir la compañía y de disfrutar del despertar de la naturaleza  y de la perspectiva alentadora que el compromiso simbólico ofrece para la renovación de la vida.

Fuente: http://radioromaniacultural.ro/documentar-dragobetele-sarbatoarea-primaverii-si-a-iubirii-la-romani/